DEPORTES Y MICRONUTRIENTES
Si el deporte forma parte de tu vida, ten en cuenta que el absorber o disponer algunos nutrientes resulta imprescindibles para tu rendimiento físico.
En tu plan de entrenamiento y en tus competiciones, la alimentación tiene un papel relevante, así que la elección de los nutrientes no puede ser al azar. En este post te daré algunas pistas para que aproveches mejor partido a tu práctica deportiva.
Tu cuerpo utiliza los nutrientes como fuente de energía, como material estructural y como elementos reguladores del metabolismo.
Cuando haces deporte, los nutrientes que cobran especial relevancia como combustible para generar la energía que tus músculos necesitan son las vitaminas y los minerales.
Si el deporte forma parte de tu vida, ten en cuenta que el absorber o disponer algunos nutrientes resulta imprescindibles para tu rendimiento físico.
En tu plan de entrenamiento y en tus competiciones, la alimentación tiene un papel relevante, así que la elección de los nutrientes no puede ser al azar.
En este post te daré algunas pistas para que aproveches mejor partido a tu práctica deportiva.
Tu cuerpo utiliza los nutrientes como fuente de energía, como material estructural y como elementos reguladores del metabolismo.
Cuando haces deporte, los nutrientes que cobran especial relevancia como combustible para generar la energía que tus músculos necesitan son las vitaminas y los minerales.
Sin embargo, es importante ofrecer al cuerpo una reposición de los minerales que se pierden a través del sudor, además de ingerir mucha agua para recuperar el nivel óptimo de hidratación y mantener el rendimiento físico.
Es frecuente que en el Gym te ofrezcan suplementos o aminoácidos y quizás pienses que esto será suficiente para tu cuerpo. Pero no es así.
Sobre todo cuando trabajas con peso, las fibras musculares deben romperse para poder crecer y muchas veces también hay una acumulación de ácido láctico lo que puede generar dolor y una recuperación más lenta.
Es por ello que te recomiendo que leas con atención para informarte más sobre el tema.
Vitaminas:
Existen las vitaminas hidrosolubles (que se pueden eliminar por la orina) y vitaminas liposolubles (que son solubles en grasa y, por tanto, permanecen más tiempo almacenadas en el cuerpo).
Hidrosolubles:
Destacan las vitaminas del grupo B y sus funciones son:
Ayudar a las células a convertir los hidratos de carbono en energía, especialmente para la contracción muscular y para la función del sistema nervioso.
Contribuyen de manera sustancial en el rendimiento físico y mental.
La piridoxina o vitamina B6, contribuyen en la formación de hemoglobina, aspecto clave en la oxigenación de todas las células del cuerpo.
La vitamina B12, por su parte, interviene en la formación de glóbulos rojos, es necesaria en la transformación de los ácidos grasos en energía y ayuda a mantener la reserva energética de los músculos evitando que aparezca la anemia o fatiga.
Liposolubles:
Vitamina D:
Su carencia o déficit puede llevar a enfermedades de los huesos como la osteoporosis o el raquitismo.
Juega un papel importante en los sistemas nervioso, muscular e inmunitario.
Es una vitamina muy necesaria para la absorción del calcio por los huesos, y además contribuye al buen funcionamiento de las fibras musculares.
Vitamina C:
La mayoría de las personas obtienen suficiente vitamina C de los alimentos y bebidas que consumen. Sin embargo, ciertos grupos de personas son más propensos que otros a tener dificultades para obtener suficiente vitamina C:
Los fumadores y las personas expuestas al humo del cigarrillo, en parte porque el humo aumenta la cantidad de vitamina C que el cuerpo necesita para reparar el daño causado por los radicales libres.
Los fumadores necesitan 35 mg más de vitamina C por día que quienes no fuman.
Las personas que consumen una variedad muy limitada de alimentos.
Entre otros.
El déficit de Vitamina C en tu cuerpo sometido al ejercicio puede causar:
Cansancio,
Inflamación de las encías, pequeñas manchas en la piel de color rojo o violeta.
Dolor en las articulaciones.
Mala cicatrización de las heridas, y vello ensortijado o en forma de “sacacorchos”.
Depresión, inflamación y sangrado de las encías.
Aflojamiento o pérdida de dientes.
Es un excelente reparador celular y retrasa el envejecimiento.
Minerales.
Así como las vitaminas son necesarias para el metabolismo energético, en la práctica del deporte los minerales más importantes para el metabolismo son el hierro, calcio, potasio, magnesio, sodio y zinc
El hierro es fundamental para el transporte de oxígeno en la sangre, por lo que ayuda en la práctica deportiva.
En cuanto al calcio, es un mineral imprescindible para la contracción muscular, además de la construcción y el mantenimiento de los huesos.
El potasio es necesario para la descomposición de los hidratos de carbono y su utilización para obtener energía, y también es clave en el desarrollo de los músculos.
El magnesio es clave en la función muscular y la producción de energía. El sodio también participa en la contracción muscular.
El zinc tiene una función antioxidante y un papel importante en la actividad muscular (ayuda a disminuir la fatiga durante ejercicios de resistencia).
Hidratación. Otro aspecto a tener muy en cuenta es que el aumento de sudoración comporta con una pérdida de minerales y líquidos, por lo que es de vital importancia rehidratarte después de cualquier ejercicio físico, especialmente si es intenso.
Como hemos comentado, en el deporte se consume una gran cantidad de energía y se pierden minerales a través del sudor.
Por eso en HAFE atendemos a todas las personas que están interesadas en mantener un buen rendimiento deportivo con salud, los orientamos en la nutrición y reparación celular y reponemos de manera natural las vitaminas y los minerales que han sido consumidos o eliminados.
Así mantendrás un rendimiento físico adecuado y sobre todo con salud.